Cuando la pasión huye

El sexo cuando se vive en plenitud es maravilloso, puedes desde comer chocolate y saborearlo como puedes disfrutarlo con olores, sensaciones y texturas…

Si día a día tratamos de ser innovadores a la hora del cuchi cuchi será mucho más excitante y agradable, pues no caeríamos en lo monótono y desabrido…

El problema es cuando ya estamos en lo aburrido, tendríamos que analizar porque caemos en ese “agujero” negro de desilusiones y fracasos, porque no permanecer en la línea de la pasión y sabrosura?

Escuchando alguna vez en una conferencia sobre sexualidad, la Dra. A cargo de dar la plática comentaba que lo que pasa es esos casos es que a todos nos gusta sentir y no dar nada a cambio, somos egoístas y solamente queremos satisfacer nuestras necesidades carnales, y conforme pasa el tiempo la otra  persona se hastía y termina por dejar que las cosas pasen como tengan que pasar.

Algunas personas después de haber disfrutado durante un largo tiempo con su pareja una vida sexual muy activa y apasionada, paulatinamente se les va perdiendo el interés y después es muy difícil iniciar o prestarse para un encuentro sexual sin que parezca que se le está haciendo un favor a la pareja.

Pero qué hacer ante tal situación?

Lo primero es una buena comunicación con tu pareja y decirle cuando las cosas que está haciendo no te gustan o te parecen aburridas, así él o ella buscaran la manera de que la chispa salga de donde este escondida, pero también aguas, no solo es trabajo de una persona, si estas consiente que tu relación se está viendo afectada por este problema, aplica también una solución, una relación es de dos…

Como escuché por ahí hay: “con variedad es mejor, como la ensalada con todo y aderezo”

Que tengan Buen día.

Dany Jácome